Lo que debes saber sobre la diabetes gestacional

Uno de los puntos que se debe tocar, sin duda, es cómo tratar la diabetes durante el embarazo. De no contar con buena información, las mujeres que sufren este padecimiento en el período gestacional podrían pasar un calvario.

Esta diabetes se debe, especialmente, a los desórdenes que surgen a raíz de los cambios hormonales de la mujer embarazada. Claro está, este tipo de diagnóstico es bastante delicado. Sin embargo, su pronóstico suele ser bastante alentador.

De hecho, la diabetes gestacional se puede curar cuando el embarazo termina, aunque todo depende de las características de cada paciente.

Tratamiento

La diabetes gestacional se combate con insulina. Lógicamente, las técnicas y cantidades de aplicación debes ser específicas, acordes para embarazadas.

Según diversos estudios científicos, los tratamientos basados en insulina son una poderosa mano amiga en la lucha contra  la diabetes. Sus beneficios se pueden optimizar con una eficaz técnica de inyección.

Los sitios de inyección, así como los tipos de agujas (ultra final, ultra delgadas, de 6 mm, etc…), son factores a tomar en cuenta. El objetivo es que la inyección sea, primero que todo, eficaz. También debe ser cómoda y prácticamente imperceptible.

Como en otro en tipo de inyecciones, la parte superior de los brazos, el exterior de los mulos, los glúteos y el abdomen son los sitios ideales. El último, de hecho, suele ser evitado en mujeres en gestación, pero se ha demostrado que son seguras en los primeros dos trimestres del embarazo, siempre y cuando se deje –al menos, un dedo de distancia del ombligo hacia afuera.

Es sumamente importante que la paciente sea inyectada en diferentes sitios, es decir, es necesaria la rotación. Cuando siempre se aplica en el mismo lugar, pueden surgir lipodistrofias (daños en el tejido de la piel).

Reutilizar jeringas, lógicamente, tampoco es recomendado. Este tipo de productos médicos son desechables, ¡Recuérdalo!

Mito

Ya que hablamos del embarazo, otro tema que no se puede saltar es el sexo.

Sin duda alguna, el embarazo es una etapa llena de mitos.  El sexo durante los meses de gestación, especialmente, es un aspecto arropado por decenas de falsos paradigmas.

Hasta mediados del siglo XX, las relaciones sexuales estaban prohibidas para las mujeres en estado. Aunque en la actualidad se ha ido derribando este mito, aún existe una gran desinformación al respecto.

De hecho, cualquier mujer que tenga un embarazo sin complicaciones puede disfrutar del sexo. Sin embargo, de presentarse condiciones especiales, el especialista es quién debe decidir si es conveniente suspender las relaciones temporalmente o modificar la intensidad y periodicidad.

Lejos de la realidad

Uno de los mitos que ha sobrevivido por cientos de años es que el acto sexual durante el embarazo puede causar un aborto involuntario. Nada más lejos de la verdad. Realmente, los abortos involuntarios surgen por diferentes problemas vinculados a los cromosomas y al desarrollo del feto. Estas anomalías surgen de manera involuntaria o no tienen nexos con el acto sexual o la abstención.

Otra creencia, un poco menos fatalista, es que las relaciones pueden lastimar al bebé en camino, por lo cual podrían ocasionar que nazca con alguna anomalía. Esto, literalmente, es imposible. La penetración en si no genera daños al feto, ya que éste se encuentra protegido por los músculos del útero y el saco amniótico.

Por supuesto, siempre que la embarazada se sienta cómoda, el sexo se puede practicar en cualquier posición. Lógicamente, conforme crece el vientre de la mujer, el desarrollo de las relaciones debe ser más sutil.

You may also like...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *