Claves para alimentarse sanamente durante el embarazo
Sin duda, el embarazo puede resultar una etapa un tanto frustrante. Y es que las mujeres en estado se enfrentan a decenas de mitos, algunos falsos, especialmente sobre la alimentación.
Sin embargo, si la embarazada y su entorno están bien informados, este período puede ser más llevadero. La alimentación, de hecho, no debe ser un dolor de cabeza. Puedes comer casi de todo, salvo que tengas alguna patología especial.
Lo importante durante el embarazo es mantener el chequeo médico como constante, y realizar los exámenes rutinarios en los primeros meses.
Primero exámenes y luego dieta
Primero, antes de saber qué puedes comer y qué no, debes acudir a un especialista y hacerte los exámenes que te exija. Esto marcará tu dieta durante el embarazo. Además, te mandará a incluir vitaminas o medicamentes. El ácido fólico, generalmente, no puede faltar.
Una vez tenga los resultados del examen, el especialista te indicará la dieta. Sin embargo, es fácil prever cuáles alimentos te recomendará, salvo que sufras alguna enfermedad especial.
Carnes, pescados y huevo, por ejemplo, son elementos imprescindibles. De hecho, de ellos debes sacar la mitad del aporte proteico de tu dieta. Además, significarán una poderosa fuente de energía, necesaria para una etapa como el embarazo.
La grasa, aunque pocas personas lo crean así, es necesaria. Sin embargo, no es cualquier tipo de grasas el que debes consumir. La principal fuente debe ser el aceite de oliva. Aplícalo en la mayoría de tus platos, y también a la hora de cocinar.
Los ácidos del aceite de oliva son fundamentales para las embarazadas. Entre otras cosas, ayudan en el desarrollo del tejido nervioso y la retina del feto.
Preparación correcta
Si eres de esas mujeres que le encanta cocinar con mucho condimento, es necesario que sepas que –de quedar embarazada- debes olvidar este hábito, al menos por nueve meses.
El aporte de sal, por ejemplo, debe ser bajo. Si te cuenta un poco esto, puede llegar a una aplicación intermedia, pero no más. Si es yodada, mejor.
Al cocinar, trata de incluir productos lácteos. También puedes utilizarlos como bebida acompañante. Lo importante es que no los dejes por fuera.
Consumir productos lácteos, claro está, es nutrirte de calcio, y este elemento es importante para una eficaz formación ósea del feto.
Otro aspecto que debes conocer
Sobre el sexo, por supuesto, también debes estar bien informada. Si te has preguntado si puedes tener relaciones durante el embarazo, la respuesta es sí. Sin embargo, hay ciertas consideraciones.
Hasta mediados del siglo XX, las relaciones sexuales estaban prohibidas para las mujeres en estado. Aunque en la actualidad se ha ido derribando este mito, aún existe una gran desinformación al respecto.
De hecho, cualquier mujer que tenga un embarazo sin complicaciones puede disfrutar del sexo. Sin embargo, de presentarse condiciones especiales, el especialista es quién debe decidir si es conveniente suspender las relaciones temporalmente o modificar la intensidad y periodicidad.
Uno de los mitos que ha sobrevivido por cientos de años es que el sexo puede ocasionar un aborto involuntario. Nada más lejos de la verdad. Realmente, los abortos involuntarios surgen por anomalías de los cromosomas y otros problemas relacionados con el desarrollo del embrión o feto, no con lo que se hace o se deja de hacer.
Otra creencia, un poco menos fatalista, es que las relaciones pueden lastimar al bebé en camino, por lo cual podrían ocasionar que nazca con alguna anomalía. Esto, literalmente, es imposible. El feto está protegido por el líquido amniótico del útero, así como por los propios músculos fuertes del útero, por lo cual la penetración no provocará daños.
Siempre y cuando la embarazada se sienta cómoda, el sexo se puede practicar en cualquier posición. Lógicamente, conforme crece el vientre de la mujer, el desarrollo de las relaciones debe ser más sutil.
Comentarios recientes