5 alternativas naturales en reemplazo de medicamentos comunes

5 alternativas naturales en reemplazo de medicamentos comunes

¿Eres de las personas que toma pastillas para cualquier dolencia que tiene? Pues hay ciertas alternativas completamente naturales que pueden ayudarte.

Es cierto que las pastillas o medicamentos son buenos para todo tipo de enfermedades, pero puede prevenirse a ser pendiente de ellas si seguimos los siguientes consejos: 5 alternativas naturales en reemplazo de medicamentos comunes.

1. Para el dolor

Para los dolores fuertes ya sean desde cirugías dentales hasta lesiones deportivas, se suele recetar hidrocodona o acetaminofeno, pero el mejor remedio para estos dolores son las terapias como la quiropraxia y la acupuntura.

2. Para el colesterol alto

Lo mejor para volver el colesterol a sus valores normales, es cambiar la dieta. Alimentos como la avena, el ajo, el aceite de oliva y el vino tinto ayudan con la inflamación en el cuerpo y se ha demostrado que puede ayudar a reducir el colesterol «malo» LDL y a subir el colesterol «bueno» HDL de forma natural.

3. Para la presión arterial alta

Sólo con aumentar el nivel de potasio, presentes en un plátano o en una taza de jugo de tomate o agua de coco, estarás reduciendo la presión arterial, aunque no lo creas.

4. Para la ansiedad

Si estás sufriendo de ansiedad, es probable que tu médico te recete alprazolam. Pero puedes encontrar una solución mucho más efectiva, económica y sin contraindicaciones: simplemente escribe.

Los sentimientos de ansiedad pueden empezar con cosas pequeñas y terminar por salirse de control. Cada vez que tienes un pensamiento ansioso acerca de una situación determinada, surgen reacciones físicas, como mariposas en el estómago o náuseas y esto se convierte en un verdadero círculo vicioso.

¡Haz la prueba! Escribir un diario puede ayudarte a entender mejor qué es lo que desencadena tu ansiedad y qué te ayuda a aliviarla.

5. Para la depresión

Si estás sufriendo de depresión, puedes empezar a consumir un remedio natural muy rico: el pescado.

Algunas investigaciones descubrieron que el aceite de pescado puede tener un efecto antidepresivo, además, muestran que el consumo de omega-3  de dos a más veces a la semana puede reducir el riesgo de depresión en un 50%.

Si no te gusta el pescado, puedes sustituirlo por verduras de hoja verde, semillas de lino, chía o de calabaza, nueces, aves de corral y productos lácteos.

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